Después de un tiempo sin escribir un post de belleza, hoy le toca el turno al cabello. Concretamente, a las tendencias en color de pelo del momento. Las seis más destacadas que van desde el discreto bronde al extremo color "granny" que copa Instagram.
Una de las principales tendencias de coloración en 2016 es el rubio platino. Eso sí, se trata de su versión más radical, un rubio hielo que requiere un gran cuidado del cabello para no dañarlo y mucho champú violeta para evitar que se torne amarillo.
Para quien desee arriesgar menos, el tono bronde sustituye a las eternas californianas. Se consigue con mechas más gorditas y empezando más cerca de la raíz, o quizás sólo con reflejos dependiendo de nuestra base de pelo, podemos conseguir este tono que describe su propio nombre: "brunette+blonde", o sea, un tono intermedio entre el rubio y el castaño.
Si deseas algo más oscuro, la moda en castaños es el tono espresso. Un marrón casi negro, aunque un tono por debajo del clásico chocolate y con mucho brillo.
Entre los pelirrojos se lleva el matiz cobrizo, más anaranjado y clarito que el rojo fuego que hemos estado viendo en algunas celebrities. Si eres pelirroja estás de suerte, porque este tono se asemeja más al color que suele tener el pelo natural de este color.
Llegando a las tendencias más arriesgadas, el conocido como "granny hair" o simplemente el color gris está pegando fuerte. En realidad deriva de la tendencia platino llevada al extremo más frío y hay que reconocer que no sienta mal, aunque sea un color poco frecuente por su semejanza con las canas.
En cuanto a colores vivos, si hasta hace poco arrasaban los tonos pastel tanto en la totalidad del cabello como solo en las puntas, ahora viran a un tono más dorado. El rose gold es el nuevo rosa de moda en el pelo y puede favorecer a aquellas a las que le sienta bien el rubio.
¿Os atrevéis con los más arriesgados o preferís probar un bronde?